lunes, 28 de diciembre de 2015

Matar es fácil

Esta quincena hemos leído Matar es fácil, escrita en 1936. La historia comienza en un tren cuando Luke, un ex policía recién regresado a Inglaterra coincide en un tren con una anciana. Esta le relata las extrañas muertes que se han dado en el pequeño pueblo donde reside e incluso vaticina quien será el siguiente en morir asesinado.



Empezamos por Pi

Libro entretenido, sin más. A diferencia de otros libros donde hay un muerto y varios candidatos a asesino aquí tenemos muchos muertos y muchos "malos". Quizá por esto, por un exceso de víctimas, termina siendo todo un poco confuso. Sin embargo, esta misma característica es la que da el toque original al libro, pues sorprende como encaja todo al final.
La supuesta protagonista tiene poca gracia la pobre, y la pseudo historia de amor es un horror y se la podía haber ahorrado perfectamente.
No es un libro para recordar pero entretiene.

Seguimos con MG

Me lo he pasado fenomenal, un montón de muertos, a lo loco. Doña Agatha dando rienda suelta al criminal más sanguinario de todo este tiempo. Coincido con Pi en que la historia de amor es la bobada más grande jamás contada. Doña Agatha lo vivía como un imperativo para que sus novelas gustasen más, pero en general no le gustaba adornar sus historias con amoríos. Y en general, salvo algunas excepciones (Tommy y Tuppence, por ejemplo) esto se le nota y hace que no le queden nada logradas.

Esta vez he conseguido saber por qué el asesino era quien era aunque no tuve claras sus razones hasta prácticamente el final.

También en este libro nos da un poco de su sabiduría de señora vivida: "el gustarse es más importante que amarse. Es lo que nos atrae."


Terminamos con Pau

Por fin,  por fin un poco de descanso del detective Poirot, que ya estaba hasta el mismísimo moño del belga de las narices y sus células grises
Nuestro protagonista se encuentra con una señora que va a denunciar que en su pueblo hay demasiados accidentes sospechosos y que eso no puede ser y, como los lectores sabemos qué estamos leyendo, efectivamente no puede ser, más aún, cuando la pobre señora también muere accidentalmente tras haber acertado una víctima más de otro accidente (que es cuando ella confirmó su teoría)
El asesino, por una vez, está cantado y no es tramposo, Doña Aghata nos grita quién es desde que aparece, a base de decirnos, una y otra vez.... spoilers...
Como dicen mis partners in crime, hay una historia de amor idiota, como siempre, aunque quizá aquí se ha esforzado incluso menos de lo habitual.
Como punto positivo: me he reído a carcajadas con las referencias tan ingenuas a la magia negra, a las orgías, y lo convencido que está un personaje de que todo pasa mágicamente por él.
Y otro punto positivo: en el estilo habitual de las relaciones hombre-mujer (es una mujer de su tiempo, recuerden siempre) se habla de cómo una mujer puede casarse con alguien mucho mayor, de lo injusto que es el paso del tiempo para nosotras y no así para ellos; así como las diferencias de clase... y, para mostrar que es de su tiempo, vemos como una mujer puede casarse como un trabajo, algo que se hacía mucho, sin duda, que el matrimonio por amor lo inventamos antes de ayer.

Volvemos el 11 de Enero  con uno de los grandes: "Diez negritos". Tengan cuidado ahí fuera. Y Feliz 2016 a todos.











lunes, 14 de diciembre de 2015

Navidades trágicas

Una quincena más, volvemos con Navidades trágicas, otra novela más de Poirot, que se publicó a finales de 1938, algo que es importante porque en la trama se hace mención a la Guerra Civil española.

Empezamos por Pi

Si no recuerdo mal este es el primer libro de Agatha dedicado. Lo hace a su cuñado James quien parece que se quejaba de tanto asesinato descafeinado.

Y efectivamente , Agatha se lo toma en serio y organiza un asesinato con sangre , cuchillos,... y le queda como los otros, la verdad.



Tenemos una protagonista española llamada Pilar que le da un toque cercano. Hay que decir que es muy pava, pero que mucho. Un personaje poco creíble.

Me ha llamado la atención que la tal Pilar da de la guerra española de la huye "en el pueblo del que procedía nadie prestaba gran atención a la guerra " ".. El alcalde es un cargo del gobierno republicano... y el cura lo es del general Franco, pero la mayoría se limitan a ocuparse de sus viñas... Y no se meten en asuntos de política "

Y otro comentario más triste que ya por entonces reflejaba la imagen que dábamos fuera "Los españoles son muy crueles, verdad? ... todo eso de las corridas de toros y otras cosas"

El final bueno, muy bueno. Esta vez me ha engañado por completo

Seguimos con MG

Como dice Pi, el cuñado de Agatha quería sangre, y le dio sangre. Pero a chorro. Me gustan especialmente estos asesinatos que se cometen "en familia", en los que absolutamente todos tienen un buen motivo para asesinar, sobre todo cuando el asesinado no te despierta la menor empatía, y sabes que la vida de los demás va a ser mejor sin él. 

Y llega Poirot, piensa y repiensa y nos deja a todos cuajados porque esta vez no he acertado con mis suposiciones ni de lejos.

Cosas que he marcado

"- Para una muchacha criada en el sur, el ambiente inglés debe de resultarle bastante raro.
- Desde luego, pero siempre lo será más el que respiraría ahora en España."

"Creo honradamente que cierta disposición al martirio y la debilidad despiertan en el hombre determinada clase de los peores instintos." No sé si me espanta o tiene toda la razón. 

Terminamos con Pau

¡Ay, Doña Agatha, qué tramposa es usted y qué bien conoce su oficio! Empieza el libro con una dedicatoria en la que nos anuncia que esta vez el asesinato será brutal, nada de refinados venenos, no, esta vez habrá sangre y el,finado morirá brutalmente... porque por lo visto su cuñado estaba pelín harto de tantos libros iguales, Christie nos anuncia diferencias, pero son pocas, salvo la forma en la que el asesinado muere, el resto es una novela tipo cluedo de Poirot, con sus interrogatorios personaje con algo que ocultar tras personaje con algo que ocultar y ya no sé cuantas seguidas llevamos. Divertida, sí, con el amor en el aire de la misma forma disparatada a la que nos acostumbra, con un asesino imposible de descubrir (para mí que se lo inventa sobre la marcha y añade datos justo al final que no tenía previstos) 
No se me entienda mal, la recomiendo vivamente, como siempre no por el misterio en sí (a estas alturas me importa un carajo quién sea el asesino) sino por el ambiente que crea, por su particular y profundamente british visión del mundo; en esta ocasión hay un personaje español -que huye de la guerra civil, por cierto, rabiosa actualidad la de la autora- que pareciera sacado de la prehistoria; y es que ya se sabe que los británicos, y especialmente los ingleses, eran seres civilizados frente al resto del mundo, todos asalvajados, hombres matando por amor, todo muy racial, todo muy brutal... léanla y ríanse a carcajadas ante estas cosas tan profundamente ingenuas de la autora.



Volvemos el 28 de diciembre con "Matar es fácil". Tengan cuidado ahí fuera. Y Feliz Navidad.






lunes, 30 de noviembre de 2015

Cita con la muerte

Otro de los grandes clásicos de Doña Agatha es Cita con la muerte,que se publicó originalmente en Reino Unido en 1938.

Nos encontramos otra vez con Poirot en tierras lejanas, como curiosidad, fue una de las que se llevó al cine con Peter Ustinov en el papel del detective belga.

Veamos qué piensan nuestras lectoras:

Empezamos con B:

Esta vez Poirot tarda bastantillo en aparecer, casi un tercio de la novela está dedicado a que conozcamos a la familia Boynton.
Este libro sí que recordaba haberlo leído antes, y aunque no recordaba quién era el culpable sí que me acordaba de muchos de los no culpables. Creo que probablemente por eso me he dado cuenta de que, al menos en este libro, Agatha te dice lo determinante para que puedas deducir (o que al menos ella pueda justificar) quién es el asesino. Eso me ha gustado y espero que me sirva para detectar más culpables desde ahora.

Cosas que he marcado

"Un hombre que se respeta a sí mismo se independiza y hace algo con su vida. No se sienta alrededor de su madre a jugar con sus pulgares. Ninguna mujer debería respetar a un hombre que hiciera eso."

"Si algún logro ha de alcanzarse en este mundo, fíjese en lo que le digo, serán las mujeres las que lo consigan."

"¡En una tribu salvaje probablemente la habrían matado y se la habrían comido hace años!"

Seguimos con Pi:

Seguimos con Agatha en su etapa "por el mundo". De nuevo excursión, desierto y asesinato. Como novedad el crimen no se produce al principio de la novela, tarda en aparecer.
La historia tiene algo diferente en las personalidades de los protagonistas que la hace interesante, pero de nuevo cae en la repetición.
Hay una frase que resulta ser clave. La primera vez que se pronuncia no caí, pero cuando insisten  en el tema de repente recordé que en otra novela, no se en cual, se dice algo parecido o idéntico que llevó hasta el asesino. Dicho y hecho, en esta pasa exactaente lo mismo. Casi al final, pero vuelvo a apuntarme el tanto de resolverlo, en este caso sin saber el como ni el porqué, que queda bien hilado y me sorprendión gratamente.

Y terminamos con Pau;

Otra novela de Poirot en danza por el mundo, que se ve que, para no saturar, Doña Agatha nos sacó de la campiña y nos mantiene on tour; estamos a finales de los años treinta, un tiempo en el que los británicos viajaban por ahí y se sentían como en casa ¡cómo se nota que eran un imperio!

Una señora, madrastra y tirana como buena celadora, dos hijastros bocazas, una herencia, un asesinato, interrogatorios, hipótesis... aunque reconozco que está muy lograda y que es menos tramposa de lo habitual con el culpable, con este ritmo de lectura que llevamos es difícil encontrar algo nuevo... supongo que si los hubiera leído a medida que se iban escribiendo (esto es, con meses en medio) me hubiera quedado atrapada, pero no ha sido así... por repetición, a ver qué tal la siguiente.

En quince días seguimos con Navidades trágicas. Tengan cuidado ahí fuera.

lunes, 16 de noviembre de 2015

Muerte en el Nilo

Entramos en una época en la que vamos a leer los grandes clásicos de Dame Agatha, al menos los más famosos.

Esta quincena hemos leído Muerte en el Nilo (publicada también como Poirot en Egipto), otra novela de 1937: una joven heredera, su amiga no tan afortunada, un asesinato y otra vez Poirot.

Veamos qué opinan nuestras lectoras

Empezamos por Pi

Libro al más puro estilo Agatha en su modalidad Cluedo. X personas en un ambiente controlado y allí empieza a morir hasta el apuntador. Más de lo mismo pero son los que me gustan y me hacen disfrutar de este tipo de lecturas.
Chorrocientos libros después o Poirot va perdiendo facultades o yo estoy aprendiendo mucho. Desde el minuto uno, modestia aparte, sabía la identidad del asesino, la motivación del asesinato y prácticamente la forma en la que se hizo. Sólo me equivoqué en añadir un complice que no existía. Como bonus acerté también otro "misterio" secundario. Y mientras Poirot dando vueltas perdido: que gustazo 

Esto es lo que ha parecido a Pau

Una de las novelas más famosas de la autora (sobre todo por su adaptación al cine con Peter Ustinov) y, como en ocasiones anteriores, la fama es merecida; ahora bien, tiene una pega, y es que los giros argumentales, en los que reside gran parte del chiste, han sido plagiados hasta la saciedad o, lo que es lo mismo, a nada que nos fijemos un poquito, es fácil ver hacia dónde nos va guiando la autora.

Un asesinato que tarda la vida en ocurrir -pero necesitamos el prólogo (muy simpático por cierto) que nos conduce a él para entender la historia-, un montón de personajes que están todos allí no por casualidad (no es un spoiler, el lector sabe al respecto más que los Poirot) y varios crímenes que por casualidad enmascaran datos sobre la verdad de la muerte ya que no tienen nada que ver y, aún así, tienen una importancia capital. La investigación, como de costumbre, llevaba por Poirot en su estilo habitual y, como Christie es consciente de que el lector a estas alturas ya conoce su peculiar -y forzado- estilo, juega con ello, con genialidades como:
"Me gusta tener auditorio, he de confesarlo. Soy un hombre lleno de vanidad. Me gusta decir "¡Vean qué listo es Hércules Poirot!"
Lo dicho, muy recomendable, muy divertida y, sobre todo recuerden, puede que lo que pasa les suene incluida hasta la última de las sorpresas, pero Muerte en el Nilo es el original, el resto, donde haya visto estos giros antes, son las imitaciones.

Y lo que opina Bich

Otra historia que al empezarla me resulta familiar, lo de siempre, no sé si ya lo había leído o que en algunos momentos es imposible ser completamente original.

Esta vez Dame Agatha tarda más de medio libro en contarnos el primer asesinato, pero nos compensa el retraso con un disparate de muertos a lo largo del libro, hasta un total de cinco, que es una media muy buena. Al leer te vas imaginando quiénes interpretarían a cada personaje, que cuando en las novelas de Agatha hay muchos personajes hay una película detrás. Y la hay: Ustinov, Mia Farrow, Maggie Smith, Angela Lansbury, Bette Davis, David Niven...casi nada.

Y lo dicho, o soy listísima o ya lo había leído porque tenía bastante clara la identidad del asesino y casi casi cómo lo había hecho hecho. 

Otro libro de Poirot, que me resulta simpático aunque ya tengo muchas ganas de otros personajes. 

Un par de cosas que he señalado

"Si alguna de mis amigas tuviera una desgracia, yo la abandonaría inmediatamente" es un horror, pero te tienes que reír.

"Si no me equivoco...y sería la primera vez que me sucediese" nuestro amigo Hércules, genio y figura.



Volvemos en dos semanas con otro de Poirot: Cita con la muerte. Mientras tanto, tengan cuidado ahí afuera

lunes, 2 de noviembre de 2015

El testigo mudo

http://vignette3.wikia.nocookie.net/escritores-del-mundo/images/5/52/El_testigo_mudo.jpg/revision/latest?cb=20140129113215&path-prefix=es Esta quincena hemos leído "El testigo mudo", escrito en 1937 y con título original "La camarera tonta". Eso para que veaomos que el tema traducciones de títulos viene de atrás. Otros clásico con Poirot, Hastings y viejecita asesinada.

Y esto opina Pi:

Según hemos dicho en la introducción, otro clásico donde los haya. Anciana asesinada y sospechoso todo aquel que pasaba por allí en ese momento.
Sigo conociendo a Agatha cada vez más pero esta vez me he pasado de lista. Cierto es que he vuelto a adivinar al menos un asesino y que cuando Poirot dice "He sido tonto" yo he pensado "Pues yo también" y los dos hemos llegado a la misma conclusión simultaneamente. He de decir que estoy muy orgullosa de mis dotes detectivescas. Obviamente ha pasado medio libro antes de constatar que pensaba lo mismo que yo, pero lo he visto tan claro que a partir de ahí todo cuadraba. 
El problema es que me he venido arriba y he desarrollado una teoría  completa sobre el caso basándome en un comentario de la difunta que se repite un par de veces.  Al final todo era mucho más simple y el chasco que me he llevado ha sido mayúsculo. Al caso le falta esa vuelta de tuerca que distingue los libros de Agatha buenos de los excepcionales.
Entretenido sin mayores aspiraciones, sin más.

Veamos qué nos cuenta Bichejo:

Este yo ya me lo había leído porque todo me ha resultado muy familiar. Eso o la tita Agatha se empieza a repetir, que también puede ser.

Tengo ganas de Miss Marple, llevamos muchos seguidos de Poirot y va apeteciendo un cambio.

Este tipo de libros, con tantos miembros de la misma familia y que se llaman casi todos igual, a veces se me enredan unos con otros. Y poco más, he marcado un par de cosas. 

"Entre los supervivientes de su época no solía usarse el optimismo sin base. Podían creer lo peor con la mayor tranquilidad"

"De todas formas, las mujeres que se ganan la vida son tontas, en general. Si tuvieran un poco de inteligencia, se procurarían una mejor clase de vida por cualquier otro medio." Que decimos mucho entre risas que nos han tangado, pero qué bien que trabajemos. Y bueno, aquí no creo que hable Agatha, que se sentó a escribir para llevar dineritos a su casa.

A ver que le ha parecido a Paula:

Un nuevo drama familiar de Hércules Poirot... La fórmula es la acostumbrada, pero, como siempre con matices, a saber: Tenemos una familia con una tía rica y unos sobrinos a cada cual más detestable; entre los sobrinos hay dos hermanos que son unos vivalavirgen y una casada ¡horror! con un -agárrense los machos, que vienen curvas- extranjero de otra raza... Cuando asesinaron a Anna Lindh supe que yo, confundida de siempre, no era de raza blanca (decían que el asesino, de identidad desconocida, era italiano a español porque no era blanco), era de suponer que un personaje griego, que presuponemos morenito, tampoco lo sea a ojos de un inglés, por muy médico que sea. La tía rica muere dejando toda su herencia a una sirvienta y hay que averiguar quién la ha matado... si es que alguien lo ha hecho, que no está del todo claro.

Ni fu ni fa sino todo lo contrario, hilarante a ratos, un disparate de cabo a rabo... entretenidísimo... Lo que no les aconsejo, y puedo decirlo ya con pleno conocimiento de causa, es leer todo Agatha del tirón, como estamos haciendo nosotras, si su afición es el misterio, a mí me divierten mucho porque lo que busco son las contradicciones de la señora Christie, una mujer sumamente exitosa muy de su época -pero que mucho muchísimo- y lo digo porque si van ustedes buscando misterios, tarde o temprano si bien puede que no sepan quién es el asesino, saben en qué momento se va a desvelar y qué pasos se dan, novela tras novela.




 Volvemos en un par de semanas con Muerte en el Nilo. Tengan cuidado ahí fuera.

lunes, 19 de octubre de 2015

Cartas sobre la mesa

Seguimos con Cartas sobre la mesa, otra novela de 1936 y también de Poirot. Nueve personas, dos mesas de bridge, cuatro defensores de la ley y cuatro ¿asesinos? Un misterio de los de puerta cerrada. 

Veamos qué nos cuenta Bichejo:

Otra vez Poirot y otra vez sin Hastings, otra vez que empiezo igual la reseña.

Cosas que me han gustado: adoro a la señora Oliver. No puedo evitar ver en ella a Dame Agatha, me hace mucha gracia que odie a su detective finés y que de una manera u otra al final sea la más lista de todos.
Lo de solamente cuatro posibles asesinos me ha tenido cambiando de sospechoso todo el rato, seguramente por eso me ha parecido de los más entretenidos que hemos leído últimamente.

Un par de cosas que he marcado

"¡Lo que realmente importa es que haya muchos cadáveres! Si acaso decae la acción, un poco de sangre la vuelve a reanimar"  Me imagino a Dame Agatha maquinando quién será el segundo muerto de la acción. Es plenamente consciente, en mi opinión, de lo repetitivo del esquema, pero lo abraza alegremente.

"Nunca se me olvida una cara...aunque sea la de un negro...y eso es mucho más de lo que cierta gente puede decir" Otra vez las cosas de la época y cosas que hoy en día son impensables.

"Yo siempre la tengo (la razón). Es una cosa tan invariable que hasta me estremece." Poirot, genio y figura.


Seguimos con Paula:

Cuatro posibles asesinos y cuatro investigadores, sólo con eso la novela en esta ocasión ya promete... aunque se hace un poco pesada a veces por esa manía que tiene la autora de repetir cuatro interrogatorios (por duplicado además, que si cómo era la habitación, que si la partida de bridge) que, sí,que  son diferentes entre sí, pero tienden a resultar repetitivos y un poco complicados de aprehender. Y, para terminar, el final es enrevesadísimo y ¡encima! se ven de lejos las trampas que nos tiende Doña Agatha por la estructura de la novela en sí, es decir, sabes que algo no cuadra (o que sí lo hará) por las páginas que quedan para terminar.

Ahora bien, la novela, como siempre, tiene sus fortalezas, y son MUY divertidas; en Cartas sobre la mesa hay mucha metaliteratura, pero que mucha, muchísima. Por un lado tenemos a una narradora omnisciente, sí, pero que muestra bastante hartazgo de Poirot, en ocasiones se refiere a él como ridículo y todo; curiosamente coincide con mi sensación, que estoy empezando a estar hasta el moño del belga de las narices. Y mejor, mucho mejor que eso, hay una autora de novelas policiacas que está un poco harta de que sus fanes le manden cartas quejándose de que su detective finlandés (ejem) tiene comportamientos poco apropiados para un finlandés (ejem). Y, como siempre, una reflexiones bastante peregrinas sobre las mujeres... ¡qué manía con que el veneno es femenino y qué manía de presentarnos como una panda de chifladas!

Después Pi:

Ni fu ni fa y para colmo he adivinado el asesino y la forma de hacerlo. Cuatro sospechosos y con el muerto aun presente dije: “O nos sale con que no es uno de los cuatro o ya se quien es por como lo hizo”. No acerté al 100% en el método pero si en líneas generales. Y con otro de los cadáveres ya lo bordé.
Una de las sospechosas es escritora de misterio. En algún momento Poirot y ella comentan que ha repetido trama en alguno de los libros sin que nadie se enterara. Me da la impresión de que es un guiño que Agatha hace a sus lectores porque este libro sea un refrito, aunque no consigo recordar de cuál o cuales.
Entretenido sin más. 

Y por último Anijol:

A mí me ha cansado. Estaba deseando que acabara desde que empezó. Estos misterios imposibles de resolver que sé que finalmente se van a resolver de la manera más inverosímil han dejado de interesarme. Estoy con Bich en que el personaje de la escritora es claramente la propia Agatha y que trata de excusarse por las particularidades de su estrella.

He subrayado poco:

"Nadie sabía si el señor Shaitana era sudamericano, portugués, griego o de cualquier otra de las nacionalidades despreciadas por los británicos". Al menos parece que era consciente de sus prejuicios.

"Solo me pesa una cosa... haber hecho que mi detective sea finlandés. Porque, en realidad, no conozco nada de Finlandia y estoy recibiendo constantemente cartas desde allí, señalándome algunas cosas que mi héroe no pudo decir o hacer por ser imposible." Agatha, creadora de tendencias y de la novela negra nórdica. Bueno, y también disculpándose por boca ajena por las posibles inexactitudes referentes a los belgas.

(Y con esta me despido. Lo siento pero necesito un descanso de Agatha.)

 Volvemos el primer lunes de noviembre con El testigo mudo. Tengan cuidado ahí fuera.

lunes, 5 de octubre de 2015

Asesinato en Mesopotamia


Empezamos octubre con Asesinato en Mesopotamia. Publicado por primera vez en 1936 y ambientada en una excavación arqueológica, mundo que conocía bien desde hacía unos años pues solía acompañar a su segundo marido, el arqueólogo Max Mallowan.

Se trata de otro Poirot enfrentado a un aparente crimen perfecto en el que todos son sospechosos pero a la vez parecen tener coartadas perfectas.

Veamos qué opinan nuestras lectoras. Empezamos por Bichejo:

Otra vez Poirot, sin Hastings, que a mí me gusta que esté, no sé muy bien por qué, porque siempre parece el pobre el tonto útil.

Me ha gustado que lo haya ambientado en una expedición arqueológica, más todavía después de haber leído su autobiografía. En algún momento me he tenido que volver a la guía de personajes porque me he liado con los nombres y la resolución me ha parecido de las más pilladas por los pelos. 

Con todo, me ha entretenido mucho y ni de casualidad me imaginaba quién era el culpable. Aunque es verdad que cada vez me hago teorías más elaboradas. Desde hace unos meses leo más en el transporte público y en tres viajes (ida-vuelta-ida) lo he rematado. Eso también me gusta, aunque tenga poco que ver con el libro.

Un par de cosas que he marcado

"Se notaba cierta tensión en la atmósfera. Lo explicaré mejor diciendo que se pasaban la mantequilla de unos a otros con demasiada cortesía"

"No era joven. Calculé que tendría entre treinta y cuarenta años." Qué diferente a estos tiempos en los que te llaman joven hasta que das el perfil de viejo...(he mirado en lo que escriben mis compañeras y creo que no soy la única escandalizada con esto...)

Seguimos con Paula:

Nos vamos a uno de esos sitios exóticos en los que los ingleses se mueven como Pedro por su casa ¡ay! ¡la de ventajas que tiene el imperio! ¡¡Y hay hasta espías!! ¡¡espías alemanes!!

Una enfermera nos cuenta sus impresiones y así nos libramos de muchos de los pensamientos comomolo de Poirot, que seguro que los dice en voz alta, pero mira, la enfermera es lo suficientemente discreta para no repetirlos, o al menos él es lo suficientemente educado para no tratarla como trata a Hastings... tengo la teoría de que Doña Agatha se dio cuenta en algún momento de que estaba quemando al personaje, porque para un rato (como diez novelas) su forma de comportarse es simpática, pero llega a hacerse insufrible.

Me ha llamado la atención en especial esta vez los líos que se trae con las mujeres (Doña Agatha, que es una mujer de su tiempo, culpa de los líos a las mujeres, pero los hombres no salen aquí mucho mejor parados, no crean), a la muerta (que mira que tardan en matarla esta vez, hay que ver) que todos quieren-odian-admiran-detestan tan bella como adorable-insufrible... me pasé hasta la solución pensando que entre todos la mataron y ella sola se murió ¿acerté? Aaaaah, no sé, leanla que aquí tenemos una narradora en primera persona -la enfermera que va a cuidar a la señora ¿a la que le están haciendo luz de gas?- y le da un punto muy curioso a sus recuerdos.

Después Pi:

Volvemos al rollito Cluedo que tanto me gusta. Espacio cerrado y ¿Quién será el asesino? Sólo puede ser uno de ellos.
La historia se desarrolla rápida sin llegar a aburrir aunque yo también me he liado a veces con los personajes y he tenido que mirar la guía.
El desenlace sorprendente y bien ideado aunque sí que un poco traído por los pelos. Poirot ve con toda normalidad algo que sólo puede salir bien de chiripa.
Respecto a la historia detrás y su desenlace... Vamos anda, eso no se lo cree ni ella!!!


Y por último Anijol:

Debo confesar que estoy empezando a cansarme. Aparte del escenario exótico no me ha aportado nada nuevo. Últimamente además me sucede que en el párrafo anterior a que Poirot (o el que sea) empiece la resolución me viene a la cabeza el asesino. Supongo que por eliminación porque con tanta trampa el motivo y la realización del crimen se me escapan.

Nos hemos vuelto a encontrar con "alienistas". Ya tengo curiosidad por saber si cuando se tradujo realmente se usaba la palabra. También con falleba, que es una palabra preciosa y que casi nadie usa ya. Como las propias fallebas por otro lado.

Las marcas de la casa siguen ahí, cómo no:

"Pensé que siempre ocurre lo mismo. Los celos surgen dondequiera que varias mujeres deban convivir".

"¿Hechos? ¿hechos? No son más que mentiras contadas por un cocinero indio y dos criados árabes. Maitland, suted conoce a esa gente [...] Para ellos no representa nada la verdad."

"Los extranjeros, según dicen, tienen líos de faldas  cosas por el estilo". Como todos sabemos la clase política inglesa es un dechado de virtudes conyugales...

"No era joven. Calculé que tendría entre treinta y cuarenta años" ¿Cómo?

 Volvemos en dos semanas con Cartas sobre la mesa. Tengan cuidado ahí fuera.

lunes, 21 de septiembre de 2015

El misterio de la guía de ferrocarriles

Volvemos a la carga con otro libro de Poirot, esta vez acompañado de Hastings y trotando por el país de un lado a otro a la caza de un asesino que, por una vez, le tiene un poco desconcertado. Aunque sólo un poco, claro, que para es Poirot.

Empezamos con lo que nos cuenta Pau

Sé que no es la primera vez que hablo de la pésima traducción del título (por favor, que nadie me explique por qué se llama como se llama en castellano, que ese no es el problema), pero es que en este caso es especialmente sangrante ¿o alguien me va a negar que es mucho mejor este título que Los crímenes del abecedario que es como lo conocía yo de toda la vida? (que si buscan en google, encontrarán que, aprovechando la trastada del traduttore traditore, hay una novela policiaca homónima)

Nos volvemos a encontrar con Poirot -y ya van unas cuantas seguidas, se nota el éxito de la fórmula- y ¡por fin! vuelve Hastings, que ya estaba yo echándole de menos; cierto es que en todas las novelas hasta la fecha ha puesto un sustituto pero qué quieren que les diga, no hay color, teniendo al original ¿quién querría una vulgar falsificación? La gracia, en esta ocasión, es que Poirot ha de conseguir adelantarse a los crímenes que sabe que van a producirse siguiendo un orden alfabético y, por si fuera poco, ha sido retado para ello. Así que ya saben, células grises que se ve que sólo tiene Poirot (al menos de las resuelve crímenes), y Hastings aguantando el chaparrón como puede. Muy, muy divertido.

Seguimos con Bichejo


"Esto es el trabajo de un alienista" es una de las grandes frases que podemos leer en este libro que, como de costumbre, tiene un horror de traducción, que si fuese un poco menos vaga me estaría planteando seguir leyendo en inglés.

Me ha dejado bastante igual, es todo demasiado increíble, se le va un poco de las manos lo de retorcer las cosas. Con todo, es entretenido ver a Poirot más perdido que nunca. Y no tengo mucho más que aportar al tema.

Este libro ya lo había leído antes y todo el tiempo pensaba "aquí hay trampa, aquí hay trampa" pero no me acordaba de qué trampa era.


¿Qué le ha parecido a Pi?

Un rollo patatero. De los de parece que se quien es el asesino, pero si no he acertado la verdad es que me da lo mismo. Todo el libro es tan monótono y con tan poco que descubrir que cuando Agatha empieza a sacarse ases de la manga estás tan aburrida que ya da igual.

De acuerdo con mis compañeras. La traducción es peor que mala, es una aberración. Y no sólo por el título.

Como curiosidad contaros que este verano he leído la autobiografía de Agatha. Parece ser que se arrepintió siempre de haber creado a Poirot tan mayor. No sabía que iba a tener tanto éxito y que seguiría tantos años apareciendo en los libros. 

Eso responde el misterio del porqué los libros, leídos cronológicamente, no siguen una línea del tiempo clara.

Acabamos con Anijol:

Pues ni me ha parecido un rollo ni me ha fascinado. Por supuesto era imposible que todo fuera tan fácil pero no he conseguido adivinar de por dónde andaría la cosa. Y ha conseguido mantener mi interés hasta el final.

Destila de nuevo aversión a los extranjeros.

La traducción, sin duda, espantosa. Sin embargo he de decir que busqué lo del alienista y ¡es correcto! Quiero ser bienpensada y suponer que en la época en que se tradujo esa fuera una palabra habitual para describir a un psiquiatra.

Lo que más me ha horrorizado de la traducción es dejar en pasiva cosas como éstas, que nadie en español coloquial (ni culto) diría así jamás:

"Se trata de un ejemplar nuevo, pues no ha sido abierto mucho" ¿No sería mucho más natural 'no se ha abierto mucho'?

"Los almuerzos empezaban a ser servidos" Terrible.

Volvemos en dos semanas con "Asesinato en Mesopotamia". Tengan cuidado ahí fuera.

lunes, 7 de septiembre de 2015

Muerte entre las nubes

Volvemos de las vacaciones con "Muerte en las nubes".  Publicado en 1935 y el primero de Agatha en cruzar el charco. De hecho en el Reino Unido se publicó unos meses más tarde.

Otro crimen con Poirot. Además, en la línea del Orient Express, se trata de un crimen aparantemente perfecto en un espacio cerrado en el que también Poirot está presente. Y también como en el Orient Express el que no aparece es Hastings.

Lo que le pareció a Pau:

Ha sido divertido el reencuentro con Doña Agatha y su celebérrimo asesinable detective Poirot. En esta ocasión nos encontramos un asesinato en un ambiente cerrado, un avión, en una época donde ir en un avión de pasajeros es como será dentro de unas décadas ir a hacer turismo a la luna, caro, y para unos pocos ricachones.
Como nos tiene acostumbrados Poirot no da una sola pista, nada más allá de las células grises. Tenemos también dama en apuros, enamorada de uno pero que, bajo el amparo de Poirot se va situando a medida que coge protagonismo en la serie. Juego de equívocos, opiniones cuando menos curiosas sobre distintas nacionalidades, el asesino será quien menos o más lo parece... un poco más de lo mismo ¡suerte que siempre es divertido!

Veamos qué dice Bichejo:

Este es uno de los libros que ya había leído y del que, además, recordaba algunos detalles concretos, como la abeja y la cerbatana, cosas de la memoria, que recuerda lo que a ella le parece.

Porque lo que no recordaba para nada es quién era el asesino y aunque debería haberme parecido muy torticero, que lo es, la verdad es que me ha encantado el quién, el cómo y sobre todo lo retorcido y rocambolesco del por qué.

Estos misterios de "puerta cerrada" me gustan especialmente porque creo que así el autor se lo curra un poquito más.

Un par de cositas que he marcado

"Los personajes más célebres de este mundo rara vez lo parecen. ¡Si incluso a mí, moi qui vous parle, me han tomado por un peluquero!"

"- ¿Cuándo dejó de sospechar de mí? - Nunca. Usted es el asesino." La mejor revelación del culpable EVER. 

Seguimos con Pi:

Me encanta esta Agatha calificando de "zorra" a diestro y siniestro. Se va notando el paso del tiempo y lo victoriano va dejando paso a la época actual. Aviones, facsímil,...casi podría haberse ambientado en la época actúal.

Y de nuevo ha vuelto a engañarme, y esta vez lo ha hecho a posta. Porque una va aprendiendo y ya se fija en quien pasaba por allí o dijo esto o aquello. Y obviamente iba a ser X porque nadie lo había tenido en cuenta y era muy obvio. Y resulta que es es X y yo me hincho de orgullo y satisfacción , y me enfado porque estaba cantado, y al final nada es lo que parece y cierro el libro con el raro entre las piernas porque me la ha vuelto a jugar.

 Y terminamos con Annie:

Leí éste al principio del descanso para dejarme el verano libre de deberes. Y me gustó a pesar de estar un poco saturada de misterio y detectives.

De nuevo un supuesto crimen perfecto pero resoluble por las células grises del insufrible Poirot. También de nuevo la aristocracia y el lujo. Gente que viajaba en avión de París a Londres, en 1935 nada más y nada menos. Como siempre, giros y más giros y un montón trampas y sorpresas. Nada que nos sorprenda. O, bueno, un poco sí. A mí me ha entretenido.

Volvemos en dos semanas con  El misterio de la guía de ferrocarriles. Tengan cuidado ahí fuera.

lunes, 22 de junio de 2015

Tragedia en tres actos

Cerramos la primera temporada del Proyecto Agatha Christie con Tragedia en tres actos, publicada en 1935. Nos encontramos de nuevo a Poirot, sin Hastings esta vez, y con presencia protagonista sólo durante el tercer acto.

Se ha adaptado para la televisión en dos ocasiones. Una en 1986, bastante libre pues cambiaron el móvil y la localización e incluyeron a Hastings. Forma parte de esa serie de telefilmes donde Ustinov encarnaba a Poirot. La otra, en 2010, como capítulo de la serie de ITV protagonizada por David Suchet.

De nuevo nos movemos entre Londres y la campiña inglesa, entre la aristocracia y el mundo de la farándula. El vicario de un pueblo de Cornualles muere durante la fiesta que da un actor retirado instalado allí. Todo parece indicar que se trata de un accidente hasta que otro de los invitados muere en circunstancias parecidas en el transcurso de otra fiesta. ¿Cuál de los asistentes será el asesino?

Veamos qué nos ha parecido esta vez.

Empezamos con Bichejo:

Y una vez más, volvemos a los lugares comunes de Dame Agatha. Tres detectives aficionados (¿no es maravilloso un universo así?) a la caza de un asesino que, casi todo el rato, va muy por delante de ellos. Sólo cuando las células grises de nuestro amigo Poirot se ponen en marcha conseguimos saber quién es el culpable. Debo reconocer que en este caso he estado completamente despistada y que me ha pillado bastante por sorpresa.

Como en otras ocasiones, deja bastante claro que es hija de su tiempo:

"Eso es, pensó Sattherthwaite, no es extranjero, es judío."

Y en otros momentos revela verdades que para bien o para mal siguen bastante vigentes

"A las muchachas les gustan los hombres de vida turbulenta. Todas piensan lo mismo, que su amor los reformará" 

"Mamá lo habría manejado mejor que yo. Las victorianas saben los trucos (...) No se puede asustar a un mujer de la época victoriana. Dicen muy poco, pero siempre piensan lo peor."

E incluso, en un momento dado, se le va de las manos una descripción

"De joven debió de ser una belleza, pero no una belleza llamativa como la de la rosa, sino más bien la de una modesta y encantadora violeta, ocultando su dulzura con decoro." Ea.



Seguimos con Pau:

Nos encontramos con una novela de Poirot en la que Poirot apenas aparece y, aunque confieso que no me ha vuelto loca de emoción este nuevo misterio de Doña Agatha, hay tantas cosas destacables de la propia filosofía de la autora que no sé por dónde empezar así que, por qué no, empecemos con la particular filosofía de la autora sobre las mujeres:
Las mujeres no acostumbran a ser crueles con los hombres a menos que se trate de uno en particular. Sólo lo somos con otras mujeres. 
[...]en el transcurso de mi profesión he conocido cinco casos de mujeres asesinadas por sus enamoradísimos maridos, y veintidós de maridos asesinados por sus amantísimas esposas. Les femmes guardan mejor las apariencias. 
El veneno es un arma más propia de una mujer que de un hombre. (En todas las novelas de la Señora Christie, cada vez que la muerte es por veneno algún personaje lo dice, es casi un running gag) 
Y, una que me ha encantado especialmente: la autora arregla aquello que podría empezar a chirriar y que, como soy de la época que soy, en vez de "Síndrome Poirot" llamaré "Síndrome de la señora Fletcher"
[...]los acontecimientos van a las personas y no las personas a los acontecimientos. [...] Por eso, hombres como Hércules Poirot no tienen que preocuparse por buscar crímenes porque los crímenes acuden a ellos.
Oh, y no sólo eso, también me parece bastante destacable que explique por qué el carácter insufrible del adorable Poirot es tan excesivo y tan atractivo:
Yo no pretendo que mi presencia intimide a nadie. Al contrario, me gusta parecer ridículo ante todos. Además, procuro hacerme el fanfarrón para que el compatriota de ustedes piense: Un sujeto tan jactancioso no puede valer gran cosa. Este es el punto de vista inglés, pero está equivocado. Inspirando confianza en los culpables, ellos mismos se descubren. 
Está contada de una forma tan diferente a las anteriores que me da la sensación de que la autora estaba experimentando así que, aunque no haya salido del todo bien, léanla; es muy interesante por los entresijos del propio Poirot y la propia metaliteratura que encierra que por la historia, por lo que merece la pena igualmente ¡Es Agatha Christie!

Ahora Pi:

Otro prescindible para mi colección. Para colmo es un libro de Poirot pero sin Poirot. Un timo. Y de nuevo los detectives aficionados de turno, pero sin gracia ninguna. El final si es digno, que no brillante, y mejora un libro que me ha costado terminar.
Destaco los párrafos que ha reseñado Pau, donde Ágatha desnuda a Poirot.
Poirot por cierto sigue en sus trece de estar retirado como ya estaba allá por el tercer libro más o menos. Agatha no sigue un orden cronológico con el detective y me mosquea bastante.



Y terminamos con Anijol:

De nuevo un crimen aparentemente perfecto que tres amateurs se proponen desentrañar. El actor retirado, su amigo (¿a qué se dedica exactamente Satterthwaite? ese es otro misterio del que Poirot no nos ofrece la solución) y una jovencita resuelta y enamorada (cómo no) se empeñan en descubrir al asesino. Con escasa fortuna hasta que providencialmente reaparece Poirot, que había hecho mutis tras asistir como invitado a la fiesta escenario del primer crimen. Y también cómo no Poirot es capaz de encontrar al asesino haciendo uso de sus células grises.

Me ha entretenido más que el anterior pero tampoco acaba de convencerme. Creo que el poso del Orient Express permanece y que voy acusando el cansancio. Esta es la segunda vez que adivino el asesino, aunque no el motivo, ni la ejecución. Pero teniendo en cuenta lo difícil que lo pone casi siempre, algo es algo.

Iba a decir que definitivamente los Poirots sin Hastings son peores, luego he recordado de nuevo el Orient Express. Así que solo digo que pse.

Como decíamos al principio, con esta Tragedia en tres actos terminamos la primera temporada del proyecto. Nos tomamos vacaciones para desconectar del universo Agatha y dedicarnos a otras lecturas. Volveremos el 7 de septiembre con Muerte en las nubes. Mientras tanto, ya saben, tengan cuidado ahí fuera.


lunes, 8 de junio de 2015

La trayectoria del bumerán

Dos semanas después acudimos nuevamente a resolver un asesinato de la mano de Doña Agatha, La trayectoria del bumerán, publicado originalmente con el título Why didn't they ask Evans? en 1934... el cambio en su traducción es francamente incomprensible. 
Esta novela, como la gran mayoría de la señora Christie, ha sido llevada al teatro, al cine y a la televisión, así que si le interesan los misterios, no hay excusas.
La señora Christie nos lleva una vez más a la adorable campiña inglesa, ese lugar mítico donde las señoritas adineradas de noble cuna se aburren tanto que en cuanto les ponen a mano un asesinato todos sus sentidos se despiertan para resolverlo y salir así del aburrimiento. En esta ocasión el asesinato es tan misterioso que en principio ni siquiera parece más que un desafortunado accidente sufrido por un señor al que nadie conoce.

Veamos que nos dicen nuestras lectoras:

Empezamos con Bichejo: 

Hola corazones. Me he quedado prácticamente igual, no sé si por el momento vital en el que lo he leído o  porque después del Orient Exprés todo es un poco #caca.

Esta vez sí me he fijado en el clasismo de Dame Agatha "Nadie mira a un chófer con igual atención que a una persona". Fenomenal, primero los zurdos y ahora los chóferes, no respetamos nada. Y claro, ahora leo (porque esta vez soy la última que escribe) lo que dice Annie y es uno de nuestros momentos clásicos básicos de separadas al nacer.

Y poco más, me gustaría que alguien más listo me explique qué tiene que ver el bumerán.


Seguimos con Pi:

Pschhhhh. Por cierto, ¿Y ese título en español? Como si lo llama "El misterio de los callos con garbanzos"; lo mismo pega.
Mas de lo mismo, ni fu ni fa. Chica aburrida metida a detective que resuelve caso así como con potra.

Continuamos con Anijol:

Pues esta es otra de las que ni fu ni fa. Puede que se deba a que después del Orient Exprés cualquier cosa me iba a parecer poco. Sea por lo que sea se me ha hecho larga y he llegado a la aventura final con el único interés de que se acabara por fin. Por otro lado el papel de la heredera pizpireta en busca de emociones fuertes empieza a resultar repetitivo. En este caso la novedad es que que confraterniza con los 'sirvientes'. Bien es verdad que el hijo del vicario no es un sirviente estrictamente pero si pensamos que elegir al vicario era una de las prerrogativas del 'Señor' de la finca entonces ya no se aleja mucho de la servidumbre.

Otra novedad es la existencia de una clínica de desintoxicación en los alrededores del escenario de la novela. No deja de sorprenderme la diferencia abismal entre la Inglaterra de aquellos años y España.

Me ha llamado la atención que recicla el nombre de uno de los personajes de la anterior para el Doctor de ésta. Se repite Arbuthnot que, sin ser yo una experta en nombres ingleses, no parece muy común.

Termino con un subrayado que nos muestra una vez más el clasismo que rezuman las novelas (no sé si como reflejo de la realidad de la época o particularmente de Doña Agatha) "Nadie mira a un chófer con igual atención que a una persona". Ahí queda eso.

Y terminamos con Pau:

La primera en la frente: no logro entender muy bien qué pinta un bumerán en esta historia, francamente, me gusta muchísimo más el título original aunque parece que en castellano tenemos una cierta alergia a los títulos interrogativos.

La novela me ha gustado, conste, como todas las de Agatha Christie hasta ahora, pero ciertamente me he perdido un poco y no me daban ganas de volver atrás a ver si me enteraba, sólo quería seguir hasta el final; asimismo me ha resultado más tramposa de lo habitual y me da en la nariz que esta la voy a olvidar en breve. Nos encontramos con una mujer joven -y por supuesto rica heredera de la campiña inglesa- que se aburre profundamente hasta que se encuentra con un asesinato, que sí, que está bien que la voz cantante sea femenina, pero empieza con otro personaje que por alguna razón pierde toda importancia en manos de alguien que simplemente pasaba por allí... y cómo no ¡hay boda!


Es pelín enrevesado y me da la sensación de que la señora Christie es perfectamente consciente de ello hasta el punto de que el malo decide explicar tooooodo lo vivido punto por punto, por si el lector no se ha dado cuenta que no, que no se ha dado cuenta.


Dentro de dos semanas nos vemos con Tragedia en tres actos. Tengan cuidado ahí fuera.

lunes, 25 de mayo de 2015

Asesinato en el Orient Express

Estas dos semanas nos hemos subido al tren más famoso del mundo gracias a la que es, sin duda, la novela más conocida -y representada- de Doña Agatha; una nueva historia de Hercules Poirot, publicada en 1934. Sobre el argumento poco hay que decir porque es de tan conocido que, si destripáramos la novela de principio a fin y desficiéramos el entuerto, serían pocos los lectores que lo considerarían spoiler porque ¿quién no conoce la solución del enigma? Aún así, por si acaso, diremos sólo que durante el viaje del célebre tren Orient Express se produce un asesinato al que Poirot, que se encuentra en el tren y al que le piden ayuda para resolverlo antes de la intervención de las autoridades, deberá encontrar solución. Es la más famosa por algo, léanla.
Veamos qué opinan nuestras lectoras:

Empezamos con Anijol:

No había leído antes esta novela y sin embargo me la sé de memoria. Habré visto como un millón de veces la adaptación al cine de Sidney Lumet de 1974 donde Poirot es interpretado, para mí de maravilla y creo que por única vez, por Albert Finney. El resto del reparto es espectacular también (Bacall, Connery, Guielgud, Bergman...). Se hicieron algunas más de ese tipo en esa época, con repartos estelares aunque con Ustinov de Poirot, que me gusta menos. Igual de poco cicateras en medios eso sí. Grandes producciones al servicio del crimen. O algo así. Ya las comentaremos en su momento.

Aunque ya me la sabía, la novela no me ha decepcionado nada, está escrita casi a modo de guión y me parecee poco trabajo le dieron al guionista para llevarla al cine. Es tan entretenida o más que la película. Para mí, hasta ahora, la más redonda de las que hemos leído, creo que da menos vueltas y mantiene la tensión todo el tiempo. Ha sido un buen revulsivo ahora que notaba que me empezaba a cansar.

Me ha sorprendido de nuevo cómo se podía recorrer medio mundo en tren en los años treinta. La novela empieza a bordo de otro tren, el Taurus express, que recorría el trayecto entre Estambul y Bagdad. Así, entre uno y otro Poirot recorre ciudades, como Alepo, Mosul o Kirkuk, que he de reconocer que yo solo conozco de oirlas en las noticias pero por las que parece que los ingleses se movían como pez en el agua.

Algo que me resulta curioso es que nunca me imagino a Poirot como Finney al leer otras novelas y sin embargo en ésta me ha sido inevitable relacionar cada personaje con el actor de la película.

Seguimos con Pi:

Al fin llegamos al que quizá sea el libro más emblemático de Agatha. Yo había leído el libro hace años pero no recordaba el final. Tampoco he visto la película (oppps!) así que he tenido ocasión de disfutar el libro "virgen".

Como os dije la quincena anterior me he tomado este libro con calma, intentando retener y analizar cada dato con la esperanza de pensar como Poirot y descubrir al asesino antes de que me lo cuenten. Obviamente no lo he conseguido. Ni por asomo. Claro, que menuda trama he ido a escoger para mi experimento.

Leyendo con detalle te das cuenta de como se construye un libro de misterio. La escritora te abruma desde el principio con tal cantidad de datos y detalles sobre los personajes que consigue desorientarte. En uno de esos datos está la clave, pero es imposible retener todos.

Aunque no he podido resolver el misterio si he conseguido dar con un par de pistas o contradicciones con antelación para gran satisfacción, todo hay que decirlo.

En cuanto a la solución al misterio me quedé con la sensación de "bueno sí, esta solución ya la he visto unas pocas veces en series y novelas de misterio". Luego me dí cuenta que las que han sido unas copias han sido las otras. 

Todo el argumento encaja al final aunque un poco traido por los pelos pero así es una novela de Agatha.

Continuamos con Bichejo:

¿Es el mejor por ser el más conocido o el más conocido porque es el mejor? Sinceramente, no me importa. He disfrutado muchísimo con este libro, aunque no es la primera vez, ni la segunda, que lo leo. No puedo evitar recordar visualmente la peli, probablemente la primera adaptación que vi.

Es sensacional, bien ambientada, con un montón de personajes bastante bien dibujados, y con una de esas carambolas que sólo pasan en las novelas de Dame Agatha. 

Me ha gustado la cura de humildad a Poirot nada más empezar 

- Quizá conozca mi nombre...
- Parece que me suena...sólo que siempre creí que era el de un modisto.

Lo que no me esperaba es que nuestra Agatha fuese zurdófoba 

- ¿De manera que nuestro asesino es zurdo? (...) Algunas de estas heridas han sido causadas, con toda evidencia, por una mano normal. (¡¡¡MANO NORMAL!!!)

Y pone de manifiesto, una vez más, algo que creo que siempre tiene en mente en todas las historias: "Creo, señores, en la lealtad a los amigos, a la familia y a la estirpe."

Y terminamos con Pau:

Por una vez no tenía que adivinar quién era el asesino porque ya lo sabía desde hacía años, así que lo primero que me llamó la atención al leerlo es lo mucho que me recordaba al secuestro del niño Lindberg. Fui corriendo a ver las fechas y ¡bingo! Agatha la publicó dos años después de aquel horror y, no deja de llamarme la atención el final, que no recordaba del todo... ups; bah, pensemos que es una novela, es decir, está en el terreno de la fantasía y ahí todo vale, ea.

Ahora que he leído la novela, no puede sino decir que no me extraña ni mijita su fama, es divertida, construida casi por entero con diálogos mantiene el ritmo, los personajes, cada uno en su papel, son divertidos y diferentes y, por una vez -quizá porque ya sabía la solución del crimen- todo encaja o, lo que es lo mismo, no puedo decir, por una vez, que vea cómo la señora Christie lo va dejando todo lleno de trampas, me parece que esta vez todo encaja, es decir, que esta vez sí tenía en la cabeza la solución del asesinato y de ahí que pudiera construir en función de ella desde el principio.

En dos semanas La trayectoria del Bumerán, tengan cuidado ahí fuera.